viernes, 15 de marzo de 2013

Ex Kadecos


Hola, hola. Tanto rato esperándote, pensé que ya no llegabas.
No me digas nada! Te viniste por la calle del accidente?! Yo pasé por ahí mismo un segundo después de que había ocurrido, me puse nerviosa, pensé que podría ser de algún conocido, así que me bajé y hablé con un policía, me dijo que no me podía decir los nombres, pero sí que iban a cerrar la calle, también quedamos de salir el viernes, pero bueno esa es historia aparte...

Lo que te quería contar es que fui a la oficina, a buscar el finiquito y entrando me encuentro con... sí sí! Ja! Me asombra!! Tenemos un tipo de comunicación telepática.
Ahí estaban, los mismos Gabriel y Horacio. Gabriel, chiquito como siempre,  tratando de explicar con diez palabras las dos primeras que ha dicho, y Horacio, con su olor a casa de viejitos.

Después vi a Lorena y Valentina. La Vale se veía distinta, hasta atractiva. Yo creo que era porque tenia el pelo lavado.
La Lorena más flaca, contó que se había ido de vacaciones, un tour extraño, medio místico; mencionó varios lugares, pero ahora sólo me acuerdo de Bali.
Y te digo Carmen, que no debe estar ganando nada de mal, porque dijo que se "habían", - haciendo notoriedad de que no andaba sola - subido a diez aviones y que habían sido veintitrés días de relajo total, aislada del mundo real, no llevó teléfono,  ni se conectó a internet… y claro yo dije lo mismo, para qué iba a querer internet allá si andaba con el gordo ese, porque yo igual que tú estoy segura que era él, quien más si no? Eso ya no lo pueden seguir disimulando.
Ah sí, en eso estaba... dijo que todo fue en hoteles de cinco estrellas. Es cierto Carmina, tratan de reírse en nuestra cara, porque nos echaron, y sí, “nuestra”, porque aunque lo haya dicho sólo delante de mío, ella miraba con ojos de saber que ya te lo estaría contando aquí mismo, porque aunque lo niegue, harto que ella viene aquí a tomar desayuno, almorzar, picar y lo que sea… y de seguro con el gordo sudado ese. Dice Matías que tiene hasta crédito aquí, que paga a finales de mes todo junto. Sí, si te digo que viene harto.

Al rato me fui con  Gabriel y Horacio al edificio del frente para que me pasaran esos malditos DVD’s de los programas.
No, si eran cinco, lo que pasa es que de los cinco que me había pasado Horacio, perdí tres.
Mientras estábamos ahí decidimos llamar a Isabel, para pasarles las mugrientas tablas y todo eso para que pueda seguir con la mierda de proyecto.
Dijo Isabel que "estaba por llamarnos", para invitarnos a un restaurante con su suegra, porque en un par de meses por fin se casan.
Flacuchento asqueroso, que rabia que se case con Isabel. Bueno, aunque también pobre flaco… si Isabelita fue capaz de quitarnos todo el proyecto, y por cierto el trabajo también, quizás que le va a quitar a él?
La cosa es que estamos invitadas y yo no voy a ir porque voy a estar en El Cairo, rogándole a algún dios que nos dé trabajo.
No me devuelven nada de plata porque ya es muy tarde para cancelar el viaje, por eso voy a tener que ir; pero mira, al menos me sirve para relajarme y distraerme un poco, claro que toda la lista de encargos que me habías hecho vas a tener que olvidarla. No no no, de verdad que nada.

Sí, seguían pegados a mí, ya me sentía rara; iban demasiado cerca, no sé.  Si fuimos equipo de trabajo, ya es pasado, ahora que salgan a bailar y a hacer locuras a la calle con la pelirroja, a ver si lo pasan tan bien. Te aseguro que jamás.
Lo que al final dejó mi espalda tensa, fue tener que decirles por cuarenta minutos que antes de contarles lo que dijo Julián tenía que hablar contigo. Me tenían desesperada.
Después de un rato se les olvido el tema.

Iban acompañándome a la recepción y justo cuando íbamos a cruzar... chaz! Pepe y su esposa Anabella. Me dio la idea de que se ve menor; y en cambio la bruja se cortó el pelo y se echó cinco años encima. Nos contaron que Eliana, la panameña de los pechos con estrías, se casa este viernes, que casi todos van. Ay! Como querías que le dijiera eso!? Tú estás loca! Jajajaja.
Sí oye! todos se casan, que bicho les picó?
Los de arriba ya se fueron a sus ridículas vacaciones grupales y me contó que le habían mandado una foto donde estaban todos listos para bucear en medio de los peces de colores y corales en ese mismo momento. Que María Cristina ya fue recontratada en su antiguo trabajo, pero en un mejor puesto. Que Marta sigue en el tercero, sin producir nada y que se fue a vivir con su novio al pueblo perdido de donde es él. Que Diego todavía sigue enamorado de ella y lo que es más patético, es que cada vez que le manda alguna tarjeta, la muy zorra la pone en el panel y que ya todos le conocen la letra. Pobre Diego. Oye! Yo nunca lo traté tan mal.
Que el de lentes de botella de vino...
Ay Carmina! No puedo seguir sin otro vodka. Y como antes nos tomábamos más de cinco?? Bueno, ya veremos, a la hora de pagar se arregla. Pensé que el estar cesante te había lavado el cerebro y que ya no tomabas, jaja. Cuántas veces te he dicho que no es malo porque viene de la fruta?

La esposa de Gabriel sabía más que el mismo Gabriel; hablaba de los correos electrónicos  que "les han llegado".
Al final me salvo la campana, porque vi que venia Roberto, que tú sabes que no puede ni ver al pelado y su flamante esposa, así que me despedí más rápido que lo imaginable y me fui.
Ahí se habrán quedado conversando quizás hasta que hora. Cuando se encuentren con alguien más le contarán de nosotras dos, aunque traté de darles poca información mía, di más tuya, jajaja, no me pegues, si es broma, tu crees que estoy loca como la Javiera?? Jajajajaja

Cuando estaba en la oficina, bueno sí sí sí, es la fuerza de la costumbre nada más, en la ex-oficina, sentí el olor a malditas montañas de papeles y de trabajo y un poco a invierno, porque el día está raro hoy y te extrañe mucho. Me acordé de todas las rabias y risotadas que lanzamos juntas ahí.
Que impresionante como ha pasado el tiempo. Hace diez años ni nos conocíamos, ni sabia que te iba a conocer en esa porquería, porque desde que llegué no me gustó y  tampoco sabía que iba a echar tanto de menos no estar en esa ratonera de oficina, ni que iba a usar tanto el transporte publico, porque desde que vendí el auto con la idea de renovarlo.... no sé por qué te hice caso; después de eso nunca más manejé. Ok, pero también habían otros momentos para hablar, no me digas ahora que lo mejor que hice fue vender el auto para irnos juntas en micro! Tampoco pensaba que pasaría la mitad de los domingos en tu casa, que de verdad no era tuya…

Pero Carmina, eso es difícil, por último, si no lo encontramos juntas, cada una le presentará a la otra sus compañeros de trabajo, es hasta más entretenido, no crees? y tendremos tantas cosas que contarnos y que hablaremos por teléfono todos los días.
Bueno amiga, marchémonos que es tarde. Cuánto me gustaría ver la cara de la Lorena el día que venga a pagar su consumo del cuchitril éste y se encuentre con un pequeño extra de dieciocho vodkas, cuatro tablas de quesos y tres pizzas!